En el estudio biomecánico de la pisada se realiza un análisis de la posición y presiones del pie. Con la intención de tratar alteraciones biomecánicas, se valora el movimiento del mismo y cómo éste influye en estructuras como las rodillas, cadera y espalda.
Realizar ejercicios específicos de fortalecimiento, estiramientos, colocar órtesis plantares o reeducar la postura, pueden ayudarnos.
Para personas que por su actividad son susceptibles de tener o tienen alguna dolencia del aparato locomotor como puede ser en la espalda, cadera, rodillas, tobillos y planta o dorso del pie, cuyo origen se sitúe en la forma de apoyar o de caminar en su día a día.
En niños en edad de crecimiento. Los pies de los niños están en constante evolución y detectar a tiempo una posible patología puede marcar la diferencia entre diferentes tratamientos para tratar de acabar con el problema desde la raíz.
Deportistas que quieren prevenir o tratar alguna lesión relacionada con su biomecánica, así como mejorar su rendimiento deportivo.
Con ello podemos definir la existencia de una lesión musculoesquelética o localizar una estructura susceptible de sufrir una lesión.
Comprobamos las posibles pérdidas funcionales que pueda padecer el paciente.
Localizamos las zonas de máxima presión para tratar de prevenir o aliviar diferentes patologías mediante el reparto de las fuerza de presión o cizallamiento.
Mediante el registro y grabación del movimiento podemos analizar el funcionamiento musculoarticular y cómo éste influye en las diferentes zonas del cuerpo como las rodillas, la cadera o la espalda.
En base a las diferentes pruebas realizadas daremos un diagnóstico siguiendo un criterio profesional a través del cual marcaremos una línea de tratamiento acorde a los objetivos que queremos conseguir.
Controles periódicos que nos permitirán ir evaluando en el tiempo la evolución del tratamiento del paciente hasta el alta.